Que buen casting

Sin mencionar que la idea y el concepto estan bien expresados, la actuacion del perro es magistral, se merece un Oscar. Éxitos

IKEA - Dog

El “buena gente”

Hoy se me ocurrió, y por conocimientos previos, hablar un poco sobre esta significativa frase que se le atribuye a cierto tipo de personas: “ese huevon es buena gente” o en todo caso para el lado femenino, “es bien bueno” – mientras que debilita el tono de voz para que suena más dulce. Pero, ¿Cómo es el buena gente?, ¿Quiénes son buena gente?, ¿Por qué son buena gente?
Esta frase es casi un vicio que ha hecho que se simplifique de la manera mas holgazana a las personas. No atribuye a características de personalidad ni de carácter, solo es un estado. El “buena gente” no es lo mismo que buena persona. El “buena gente” es el que es condescendiente con todos, no se molesta, tiene carácter pasivo, y casi nunca le saca provecho a la vida y a las circunstancias. Es casi tonto, no pide mucho, no se indigna ante abusos ni adversidades, siempre esta callado y tampoco sonríe demasiado porque puede ser visto como síntoma de mucha felicidad y codicia. Al “buena gente” lo caracterizan generalmente los que son el antitesis de este personaje, aprovechadores, “vivos”, pendejos, lo cuales saben que el que no es conchudo muere de cojudo. Inmortalizan al “buena gente” como parte de la no competencia para conseguir ambiciones personales. Tú no eres competencia porque eres muy buena gente. En cambio, “Buena persona” es diferente, este si puede molestarse, y es mas equilibrado con lo que pide su ego y lo que tiene que hacer, y poca gente lo sabe apreciar.
Esta relación pasivo es igual a bueno no le hace mas que mal, no solo a la persona a la que se le atribuye, sino a los que caracterizan porque suelen limitarse a ese tipo de caracterizaciones que pasan en la superficie.
Hay que decir, que en el “buena gente” hay algo de sabiduría por preferir la interacción con los demás en paz, sea por susceptibilidades o algún efecto psíquico.
El buena gente suele utilizarse como muestra de compadecer a alguien, de “pobrecito” el sufrido de “buena gente”. Más que altruista es casi síntoma de superioridad.
Los “buena gente” suelen ser el gasfitero, el profesor, “el casero” – que es otro caso especial por su relacion lucro-cariño – el panadero, o amigos. En fin, cada uno se relaciona como quiere y el “buena gente”, en cierto modo, le hace bien a la humanidad. Éxitos

Cfr. Valses, Rajes y Cortejos.

Pobre pero feliz

Hace ya más de cuatro meses que dejé de chambear. Fueron muchos meses de confirmación sobre mi interés de seguir un buen tiempo de mi vida en área de creatividad de una agencia. Para comentar un poco sobre esta experiencia, conocimientos sobre esta rama del marketing, quiero decir que esta más que subestimada. Si bien es cierto el prejuicio de que los publicistas no son más que un grupo de vagos, les comento que por no estar enternado todo el día no lo hace a uno más trabajador, y de eso muchos padecen. Se puede trabajar de nueve de la mañana a dos de la mañana sin ver la calle y encerrado tratando de sacar una idea para una campaña después de que la de cuentas se tiró casi veinte ideas, es frustrante. Sin mencionar que en el caso de ser directo de arte, que es mi palo, te consume todo el día chambas chiquitas que es por ahí donde tienes que empezar a hacerlo. Banners, paneles, polipasacalles, esta palabra pensé que era una broma, jaladores, afiches, colgantes, etc.
Las ideas son más que delicadas de trabajar, no te puedes aferrar tanto. Es una chamba que balancea muy bien el todas las horas que te tienes que quedar ahí. Lo valen, porque no podría trabajar en otro lugar.
Los publicistas cargan con otro prejuicio que paran de fiesta en fiesta con modelos y demás, y la verdad es que no cogemos ni una teta. Todo el glamour que los rodea no es más que burocracia. Con esto me lleva a conectar con el tema premios. Es más que un tema, es la lucha paralela que tiene el creativo fuera de su labor como comunicador. Un premio puede ser el trampolín a las mejores agencias, un “Ojo” o un Cannes”, a pesar que es más que difícil sacarlo, se tienen que conformar con un APAP, es casi la meta.
Terminando con esta pequeña introducción al mundo de la publicidad, quiero empezar con que aun me falta un año para acabar la universidad, y mis directores de carrera no hacen más que joder y joder, ya tengo algo de experiencia, pero quiero seguir chambeando, cuando te acostumbras y luego pasar al desempleo es todo un trauma psiquico. El sueldo en las agencias no se compara en nada al de las empresas, creo que esto se formo por el prejuicio de que son “publicistas” y que la facturación de una empresa es mucho mayor.
Se de chicas que practican, con un horario totalmente partido, y en general no hacen ni deshacen, ganando un módico sueldo de 900 nuevos soles más bonificaciones, seguro y a veces hasta comida, y mencionan muy contentas que no hacen ni mierda en la chamba. No me parece gracioso, en agencia chambeas y jodido, para a veces no ganar nada, trabajas a donorem, y con suerte consigues sueldo mínimo, pero eso sí, tienes que vivir ahí. Por eso, estoy desempleado, he tenido ya más de cuatro entrevistas, y todas con una sola respuesta: tu carpeta esta buena pero lamentablemente….tu horario. Lo peor es que pensé que mi horario era el mejor, y lo es.
Después de meditar sobre el tema de que trabajar en agencia mientras estudias, es casi imposible para el área de creatividad. Estoy dispuesto a mandar curriculums a empresas, llevar una camisa todo el día y los viernes ir “casual”. Salir a las 6 en punto y no como en agencia que nadie se va antes de las ocho: NADIE. En fin, si alguien esta chambeando en alguna empresa y en el área de Marketing necesitan gente, ayúdenme que estoy desempleado. Me va a hacer bien ver ese paso posterior que da una campaña antes de pisar agencia. Éxitos.

Colores Bravia

Esta es una campaña puramente artistica. Con una concepto simple, sin ser muy inteligente, pero fuerte, explotarlo de tal manera que te ponga la piel de gallina: es un orgasmo al ojo, especialmente "Paint", y la musica de "Balls" es fenomenal. Siendo sensato, ¿Como vendes a un cliente una idea así para que invierta miles de dolares en dos comerciales de tele que juntos no llegan a cinco minutos?. En fin, espero se logre algun día por lo menos pensar la posibilidad de una ejeccucion tan impactante, lamentablemente no es solo del cliente, sino del consumidor. Sientense y disfruten.

BALLS - Bravia



Y no es computadora...



PAINT - Bravia (este si es un pajaso)



Tampoco es computadora..



No hay nada más que decir. Éxitos.

Corta venas

Bright Eyes es un buen grupo que acabo de descubrir (el cherry para Juan Daniel), Bowl of oragnes: el video es muy bueno. Éxitos.

Faltaba...

Esta parte de la vida de Amelie expresa muy bien su personalidad, la debía de la entrada anterior sobre esta buena pelicula, recíen aprendo a meter videos. Y perdonen el maldito español que apesta pero no hay otro idioma. Éxitos.

"La ciencia del sueño"

Se podría resumir en "La felicidad de estar triste". Siempre quise ver una pelicula así, en donde relata el mundo de los sueños con esa dualidad expresada en las imagenes y bien complementadas. Es muy buena y facil de ver. Éxitos.

Chetes - Una pieza

Ilustrativo

Deberian prestar más atencion a las pastruladas de NO MOLESTAR de FOX. Éxitos.

Mi problema con los celulares

Todos los cinco gatos que puedan leer este blog saben mi biológica y circunstancial "falla" en el cuidado de los celulares. Esta “distinta” atención de la realidad me juega muchas veces perdidas económicas, que en lo personal es nada, claro está hasta que repercute en el esfuerzo de otros, y su manera de percibir la realidad. ¡Odio los celulares!. Y eso no responde necesariamente a el problema ya antes mencionado. Es algo biológico, lo cual va a ser una constante en este manifiesto. Los odio porque, por donde vea, hay un cojudo hablando con -o mirando por la pantalla de este maldito aparato. Suenan en el micro, en el cine, en la calle y en el bar. Los odio porque suenan en mi casa, cuando es una llamada para mi madre o mi hermano y esperan hasta el ultimo para contestar. Suenan, suenan y suenan. ¡Y ahora suenan con canciones y voces estúpidas!, a pesar de que causan risa siguen siendo igual de molestos. Los odio porque son invasivos, chiquitos e indetectables y pueden sonar en cualquier momento. Los odio porque siempre hay gente que se los olvida prendidos en momentos que deberían estar apagados, y suenan. Los odio porque muchos, más que como una herramienta de comunicación, que es básicamente una necesidad y en lo personal también tuve que hacerlo, lo usan para ostentar un status social que vaya uno a saber si tienen, y que si lo tienen, a mi que me importa, el celular no lo hace a uno. Los odio porque desde que vienen con pantalla y cámara todos los imbéciles ven la realidad en 8 x 5, como si fuera nueva o mejor a la que teníamos antes. Además de olvidar que la función fotográfica la cumple un aparato en especial, que lo hace muy bien y no lo saben apreciar, y el celular esta lejos de ser arte fotográfico. Los odio porque más que servirte de una ayuda, son un intermediador más que te amarra al mundo consumista y de felicidad medible con deseo y dinero. Como diría Cortazar, y una adaptación burda del “reloj”: el celular no es el regalado, tu eres el regalado para la fiesta del celular, serás su esclavo para que perjudique tu vida contemplativa y el catarsis de analizar la realidad autosuficientemente. Disfruto tanto de mi soledad, que la idea de estar accesible donde vaya, cuando sea que vaya me pone paranoico. Los celulares más que libertad, te atan al capricho de todos los que tengan tu número, que en lo personal ya nadie tiene mi numero por el hecho de que se me pierden seguidamente. Me jode mucho que la conversación que estoy manteniendo con la persona que tenga enfrente se vea interrumpida porque le suena el celular. Son invasivos, pero siendo más sensato, son las mismas personas las invasivas. Podría decir que muchos sufren de móvildependencia. Y esta no es por el hecho de no estar comunicados, es casi una droga. Simplemente, por todos los “beneficios” que les da, es casi vital tenerlo en la mesa de noche. Ni se preguntan porque ni como, solo lo usan y es placentero. Es casi un fetiche. Además que genera estrés, sudor y ansiedad cuando se pierde o no está cerca.
No entiendo como pueden seguir mandando tantos mensajes de texto cuando es mucho más enriquecedor hablar frente a frente, confrontando la realidad. Investigando sobre efectos de la móvildependencia y el reciente concepto de los “tecnosexuales” recuerdo que encontré un texto que espero los aterrice un poco. Aquel artículo hablaba de como el humano, al tener todas las respuestas en la palma de su mano y con sólo discar un par de números, podría dejar de pensar críticamente y así afectar su capacidad para resolver problemas. No hay dudas que la superación viene del conflicto. Pero, con un celular en la mano, hasta las tareas más simples podrían ser superadas sin pensar. Sólo habría que llamar a alguien idóneo para la tarea a realizar, ¡y listo! Al escaparle al conflicto, al no enfrentar los problemas, el ser humano, poco a poco, podría perder su capacidad analítica. Se estupidizaría.
Las llamadas, los mensajes, incluso nuevas formas de aparatos que por decisión propia dejaron de interesarme, tienen códigos propios, no buenos ni malos pero propios. Es todo un mundo que te aleja de la realidad misma.

Llevo casi ocho celulares en mi lista, siendo la mayoría dejados en un taxi, uno con el tiempo record de dos dias de comprado, y me siento mal por el hecho del esfuerzo de mis padres por poder ubicarme con ese maldito aparato y mi poca disposición a superar este problema, no por el aparato mismo. Tengo, por eleccion propia, el peor celular del mundo, con el hecho de evitar acercamientos de celuparanoicos y robos repentinos para evitar el cambio de numero y todo el tramite. En fin, soy de los que creen que hay que sacarle el mayor provecho posible a cada circunstancia. Y cuando el mundo es un rebaño, lo único que buscan es un pastor, y lo que yo creo es que si todos fueran especiales, nadie sería ese pastor. Individualícense. Éxitos.